La definición y elementos de un modo de ejercer el poder sin consenso, sin rendición de cuentas y por la mera voluntad de hacerlo. ¿Qué es autoritarismo?
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Preguntas frecuentes sobre el autoritarismo
Una forma de ejercer el poder en cualquier situación, pero especialmente aplicable en el terreno de los gobiernos. Se usa comúnmente para calificar a gobiernos intolerantes que abusan del poder que acumulan. En resumen es una modalidad del poder por la que el poderoso exige obediencia total a quienes gobierna.
(1) El abuso del poder que posee la persona. (2) Un sistema de poder concentrado sin división de poderes. (3) La imposición de la voluntad de quienes están en el poder, sin considerar puntos opuestos. (4) Su tendencia a preservarse por cualquier medio. (5) La ausencia de sistemas de rendición de cuentas y corrección de errores.
Sí, siendo el totalitarismo la forma más extrema que se conoce. El autoritarismo es menos intenso y está asociado a las ideas de dictadura, sistemas de partido único y en general a todos los que concentran un poder excedido en los gobiernos y gobernantes.
Varias. Puede ser la simple ambición de poder, el deseo de implantar un cierto proyecto de sociedad, el tener un modo cómodo de vida, la adicción al poder…
(1) La pérdida de libertades políticas, culturales y económicas que sufre el ciudadano. (2) La sustitución de la ley por la voluntad personal del gobernante.
Por supuesto. Su uso inadecuado es el usarla para calificar a todo eso con lo que alguien no está de acuerdo, como sucede con ‘intolerante’. Es decir, cuando se usa como insulto sin que exista justificación racional.
Introducción
Las palabras ‘autoritario’ y ‘autoritarismo’ son con frecuencia usadas en el campo político para describir una situación variada de exceso en el ejercicio del poder.
Se usa también para describir un tipo de personalidad, la autoritaria. Sus palabras asociadas son: déspota, dictador, tirano, arbitrario, abusivo, opresor. Aplicables a toda relación jerárquica.
Si se aplica a política, un régimen autoritario sería ese en el que las personas están sometidas a la voluntad de una autoridad excedida. No a la ley.
Significado de autoritarismo
Es una actitud general personal de «quien ejerce con exceso su autoridad o abusa de ella». Y cuando esa persona llega al poder político su actitud forma «un régimen o sistema político caracterizado por el exceso o abuso de autoridad» (dle.rae.es).
En otras palabras más extremas, un régimen autoritario es una «Forma de poder basada en una imposición estricta de normas de conducta, que tiende a controlar todos los aspectos de la vida social».
📌 La idea central de autoritarismo es, por tanto, la del ejercicio excedido del poder de personas que están en una posición de autoridad. Por eso, es un fenómeno propio de cualquier institución, aunque aplica especialmente en gobiernos.
Autoritarismo, características
En lo que sigue, intento un examen de las característcas del autoritarismo que lleve a una definición razonable.
1. Un modo de ejercer el poder
Claramente, la noción de autoritarismo se refiere a un modo o manera de uso del poder.
Típicamente en el poder político o gubernamental, pero también aplicable a otras organizaciones, como empresas, sindicatos, clubes. La noción es amplia y vaga.
2. Poder ejercido en demasía
Esa manera o modo de uso del poder, es considerada autoritaria cuando constituye un abuso, un ejercicio indebido, por encima de lo considerado razonable o aceptable.
Por supuesto, el problema está en determinar qué es eso de razonable o aceptable. Las personas variarán mucho en las percepciones de ese límite.
3. Poder concentrado e identificado
Por igual, la esencia del autoritarismo supone que el poder está concentrado en una persona o un grupo de ellas. Ellas lo ejercitan por encima de lo debido.
Tales personas suelen pertenecer a un grupo identificable. Como una aristocracia, una oligarquía, un grupo político, militar, religioso, o de otro tipo y con combinaciones posibles entre ellos.
La esencia autoritaria está en la concentración del poder en un grupo reducido de personas y los excesos con los que ese poder se implanta.
Es decir, el autoritarismo es más probable en sistemas políticos de autoridad concentrada, como los socialistas, que en sistemas de autoridad limitada, como los liberales.
4. Variaciones de intensidad
El autoritarismo tiene gradaciones sustanciales en el uso del poder. Puede ir desde regímenes totalitarios hasta gobiernos menos extremos que permiten ciertas libertades, incluso elecciones que den apariencia democrática.
5. Imposición de voluntad sin atender consensos
El autoritarismo es fácilmente comprensible examinado la intensidad con la que quien detenta el poder hace imponer a su voluntad sin hacer caso a la necesidad de consensos.
Se ha dicho que «Los regímenes autoritarios privilegian el mando, el poder, y menosprecian el consenso».
6. Continuidad
Otro síntoma claro del autoritarismo es la continuidad del grupo en el poder por largos períodos de tiempo. Esto mueve a ese grupo a violar libertades y abusar de su poder con el objetivo de mantener su posición.
El gobernante autoritario estará dispuesto a hacer lo que sea con tal de permanecer el el poder.
7. Ausencia de rendición de cuentas
También es síntoma claro del autoritarismo el nivel en el que no existe rendición de cuentas de los gobernantes y no hay contrapesos, ni división del poder.
Definición y significado
El autoritarismo puede ser comprendido como la actitud que tiene quien está en una situación de poder al que ejerce abusando de él dentro de un sistema de poder concentrado.
O bien como una forma de usar el poder inherente en cualquier posición y que en el campo político produce opresión.
«[…] una modalidad del ejercicio de la autoridad que impone la voluntad de quien ejerce el poder […] originando un orden social opresivo y carente de libertad y autonomía». es.wikipedia.org
Eso permite entender al autoritarismo como un sistema de ejercicio del poder gubernamental en el que las personas pierden libertades y viven en un ambiente injusto, en el que no hay estado de derecho.
El punto en el que el poder rebasa su límite natural es extraordinariamente difícil de determinar. Sin embargo, se tiene una buena idea de que acontece cuando se violan libertades del ciudadano —con la censura como un caso muy claro.
La justificación autoritaria
La mentalidad autoritaria puede estar motivada por creencias de la élite en el gobierno. Por ejemplo, el suponer que la ciudadanía no está preparada para gobernarse a sí misma. Es decir, el supuesto no exagerado, de que las personas no tienen la capacidad de auto-gobernarse.
O bien el deseo de implantación de un régimen soñado por la élite, o el simple deseo de poder. La implantación del marxismo en la URSS y Cuba, por ejemplo, tuvieron esa justificación. Debieron ser autoritarios para implantar su régimen ideal.
El presidencialismo es una modalidad del autoritarismo. bajo ese sistema, el poder está concentrado en el poder ejecutivo y no existe poderes opositores de consideración.
Amplia aplicación
El autoritarismo puede ser adscrito a muy diversos sistemas políticos, de izquierda y derecha, progresistas y conservadores, absolutistas y democráticos.
Entre ellos pueden existir diferencias de grado, con por ejemplo, en un extremo los regímenes de la URSS o el Nazismo. Y en una posición notablemente más dulcificada el régimen del PRI el siglo pasado en México.
Globo de ideas afines
El autoritarismo trae a la mente conceptos conectados, como caudillo y cacique, élites, más su efecto conocido el poder embrutece y crea mundos imaginarios en la mente del gobernante.
Claramente, hay un problema en el poder político sin límites y algo llamativo, la íntima relación entre despotismo y socialismo.
Incluyendo la realidad de la irresistible tentación del totalitarismo y los gobernantes compulsivos.
En resumen
La esencia del autoritarismo está colocada en dos elementos centrales derivados de la concentración del poder:
- La ausencia de la rendición de cuentas del gobierno a sus ciudadanos y
- La anulación de libertades de las personas debida al abuso de poder.
Una buena forma de expresar el significado:
«Un estilo de gobierno en el que los gobernantes exigen obediencia incondicional a los gobernados. Tradicionalmente, los «autoritarios» han abogado por un alto grado de determinación por parte de los gobiernos de las creencias y el comportamiento y una importancia correspondientemente menor para la elección individual». McLean, Iain, McMillan, Alistair. The Concise Oxford Dictionary of Politics (Oxford Paperback Reference) (p. 30). Prensa de la Universidad de Oxford. Versión Kindle. Mi traducción.
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[Actualización última: 2023-06]
