Ciclo B
Textos de un laico: ciclo B
Cada columna contiene un intento de encontrar los comunes denominadores de las tres lecturas de la misa católica de cada domingo del ciclo B. Ellas presentan un resumen del Evangelio del día, y de las dos lecturas anteriores.20 Domingo Ordinario (ciclo B)
Nuestra existencia como rodeada de “invitaciones” al libertinaje, a la codicia, al materialismo, a las riquezas. Entre todas ellas está la invitación de Jesús...
31 Domingo Ordinario (ciclo B)
Si esas palabras salen del corazón, con un sentido de abandono propio de uno mismo para ponerse en manos de Dios, Dios comenzará a actuar en nosotros y nos daremos poco a poco cuenta de lo que Dios obra en nosotros.
21 Domingo Ordinario (ciclo B)
Esta misa es una nueva oportunidad que Dios nos presenta para decirle, sí, acepto tu invitación; quiero comer el pan de la vida...
Domingo de Ramos (ciclo B)
"Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios" y había muerto en su forma humana para salvarnos. El acto de amor más grande que puede realizarse y que no puede ser descrito con palabras humanas.
33 Domingo ordinario (ciclo B)
Quien no se encuentre preparado obviamente temerá el fin de los tiempos y sólo pensar en ello le ocasionará pesadumbre. Por el contrario, el fiel seguidor...
2 Domingo Ordinario (ciclo B)
Tenemos, por tanto, un dato real: el llamado de Dios a cada uno de nosotros existe sin excepción. De una manera o de otra, Dios nos llama sin cesar. Está en nosotros responder o no a ese llamado
23 Domingo Ordinario (ciclo B)
Porque al final, el amar a Jesucristo es también amar a nuestros semejantes. Y resulta que cuanto más amamos más consuelo somos capaces de dar y de recibir.
4 Domingo Ordinario (ciclo B)
Dios nos llama, nos habla y tiene enviados que nos hablan de él; nos invita a escucharle a él por medio de sus enviados.
Ascensión del Señor (ciclo B)
Tenemos una obligación de amar a los demás y que toma la manera de actuar siendo siempre testigos de Jesús.
15 Domingo Ordinario (ciclo B)
Debemos ser imitadores de Pablo. A nuestro nivel, dentro de nuestras limitaciones, pero es obvio que Dios no nos dice «quédate cómodamente sentado...