¿Es ‘justicia social’ un concepto tan maravilloso como se suele creer? No, no es para tanto, al menos según Hayek. En su fondo la justicia social no tiene lógica y es una idea peligrosa y rudimentaria. Los problemas de la justicia social y la Economía.

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¿Qué piensa Hayek de la justicia social?

Hayek argumenta que la justicia social es peligrosa porque, aunque popular, supone que la economía es dirigida intencionalmente por alguien que puede ser injusto. Sin embargo, la economía es un proceso espontáneo sin un director específico, por lo que los principios morales de justicia no pueden aplicarse a sus resultados. Hablar de justicia en un contexto donde no hay responsables directos es, para él, ilógico y sin sentido.

¿Qué consecuencias tiene la justicia social?

La justicia social traslada el enfoque de la justicia del individuo a la colectividad, lo que justifica la imposición de poder sobre los ciudadanos para lograr una supuesta justicia colectiva. Esto tiene como consecuencia la limitación de las libertades personales y la anulación de la responsabilidad individual, ya que las acciones del gobierno dictadas por la justicia social obligan a los ciudadanos a cumplir deberes que antes eran del ámbito moral personal.

¿Tiene otros efectos?

La justicia social se convierte en una herramienta para aumentar el poder del gobierno. Los reclamos populares por justicia social actúan como una justificación moral para que la autoridad adquiera mayores poderes e intervenga en la economía. Esto conduce a la implementación de políticas intervencionistas y redistributivas que, aunque con una apariencia amable, pueden llevar a la construcción de sistemas de poder centralizado y a un mayor riesgo de abusos gubernamentales.

¿Justicia social o justicia nada más?

Hayek no niega la justicia en sí, pero la confina al ámbito personal, donde las acciones son intencionales y puede asignarse la responsabilidad. La justicia tradicional, ya sea conmutativa (equidad en tratos voluntarios) o retributiva (correspondencia entre actos y consecuencias), se aplica a las acciones individuales. Sin embargo, la justicia social busca aplicar estos principios a resultados económicos complejos y espontáneos, donde las consecuencias son impredecibles y no hay responsables únicos, lo que para Hayek la convierte en un concepto sin sentido.

Introducción

El primer punto de Hayek es afirmar que hoy existe una expresión muy popular y, al mismo tiempo, muy peligrosa.  El autor se refiere a la frase ‘justicia social’, y su aplicación en Economía, la que tiene amplia aceptación.

Su sola mención es motivo suficiente para lograr apoyos ilimitados y dar pie a acciones de gobierno. Se asegura que la justicia social es algo que distingue al hombre bueno y moral del hombre malo y perverso.

Hayek reta esa idea y la hace sujeto de una fuerte crítica. De principio, la considera una noción primitiva y a eso añade un análisis de las dificultades que presenta la justicia social a la Economía.


📕 El libro consultado para esta columna fue Hayek, Friedrich A. von (1984). The essence of Hayek.  (Kurt R. Leube, Chiaki Nishiyama, editors). Stanford, Calif. Hoover Institution Press, Stanford University, chapter 5, «Social or distributive justice», pp 62-78.


Significado de justicia social en Economía y sus dificultades

La justicia social es simplista y rudimentaria, no tiene lógica, afirma Hayek. Ella supone que la economía es dirigida explícitamente por alguien cuyo propósito es injusto, es decir, dañar a unos y beneficiar a otros.

Pero la economía realmente no es dirigida por nadie en concreto y, por eso, no tiene aplicación en ella la justicia social. Los principios morales no pueden aplicarse a las cosas.

📌 Un proceso espontáneo, como la economía, no puede ser evaluado por reglas éticas. Por tanto, no tiene lógica hablar de justicia social.

La justicia social no es aplicable en Economía

La economía es un proceso que nadie dirige conscientemente. Este proceso tiene resultados que no son previsibles, ni intencionales. Carece de sentido y tiene dificultades el hablar de justicia dentro de realidades en las que no hay responsables.

La justicia social es un concepto no aplicable a la economía. La economía es una serie enorme de actos que persiguen el mejoramiento de las posibilidades de satisfacer las necesidades de las personas.

📌 No es posible concretar responsables específicos de los resultados de la economía. Donde no hay responsables concretos no puede aplicarse la idea de justicia.

📍 Este es el campo del lenguaje colectivista y las expresiones «sociales», como equidad social, responsabilidad social, interés social, hipoteca social, deuda social y desigualdad social.
Más ¿qué es justicia social?, ¿qué es justicia distributiva? y ¿qué es justicia conmutativa?

Un enfoque colectivista

Más aún, el significado de la justicia social ha sido dirigido, no a la persona individual, sino a la colectividad. El sujeto de la justicia social en la economía ya no es el individuo, sino el grupo.

Esto tiene una consecuencia grave, pues plantea la posibilidad de imponer sobre los ciudadanos, como grupo, un poder que les haga cumplir esa justicia.

Cuando el sujeto de la justicia no es la persona sino la sociedad, se acepta la idea de imponer limitaciones a la libertad de sus miembros. Otra de las severas dificultades y problemas de la justicia social, la pérdida de libertades.

De justicia individual a justicia colectiva

Antes de que la justicia social fuera un concepto popular, la idea de la justicia se aplicaba solo al individuo. Lo único que podía ser justo o injusto eran las acciones de las personas.

Pero, ahora, debido a la influencia de la idea de justicia social en la economía, creemos que debemos basar la justicia en las acciones del gobierno y no en las acciones de las personas.

Esas acciones de gobierno imponen a las personas deberes que se piensa son obligatorias por ser de justicia.

El punto de Hayek aquí es señalar un problema con el significado de la justicia social.

Ella provoca que desaparezca la idea de la responsabilidad personal y que la moralidad pase a depender del gobierno que obliga al ciudadano individual a realizar ciertos actos que se consideran de justicia.

La justicia social anula la responsabilidad personal y eleva el poder del gobierno sobre los ciudadanos.

El real significado de la justicia social

Al combinar las dos ideas anteriores se tiene un panorama completo del juicio de Hayek sobre las severas dificultades que presenta la justicia social en Economía.

Primero, popularidad

La justicia social es una idea muy popular aunque ello no sea una prueba de su validez. Cualquiera puede ver el uso frecuente de la expresión en gran cantidad de círculos sociales.

Es una expresión conocida y reconocida por todos. Y tiene una carga moral fuerte.

Segundo, aumenta el poder del gobierno

El efecto real de la justicia social es negativo. Ha tenido la consecuencia imprevista de dar poderes enormes al gobierno. Los gobiernos han aumentado su poder para poder implantar en la economía su idea de la justicia social que se reclama.

Tercero, una mezcla fatal

📌 La mezcla es explosiva, pues hay un reclamo popular y numeroso que exige dar mayores poderes a la autoridad sobre una justificación moral.

El gobierno acepta esos poderes adicionales y satisface los reclamos de justicia social en una realidad donde el concepto no es aplicable.

Los activistas ya saben el camino. Hay que gritar que algo es una cuestión de justicia social para lograr que el gobierno actúe con coerción para hacer lo que esas personas quieren.

Y es que la expresión justicia social contiene una gran carga emocional. Es una de las motivaciones más grandes para mover a la acción a gente de buena voluntad.

Justicia social y Economía, los problemas

Hayek ha hecho un análisis de la justicia social. El análisis indica que la justicia social no es aplicable a un proceso espontáneo en el que no existen responsables.

Peor aún, la justicia social tiene efectos no intencionales negativos, pues anula a la moral personal.

Además, Hayek ha planteado la interrogante de la compatibilidad entre justicia social y libertad. La justicia social eleva el poder del gobierno sobre los ciudadanos y limita la libertad de estos.

Problemas de lógica

Y no solamente todo eso, la noción de justicia social tiene dificultades de lógica.

Si se toma un proceso económico libre será imposible precisar responsables de los resultados que en ese proceso obtiene cada persona.

En esa economía en ocasiones se falla y en otras se acierta. Ni en los fracasos, ni en los éxitos puede determinarse con exactitud un responsable del hecho.

Cuando cada persona actúa con libertad, usando sus habilidades y capacidades para lograr sus objetivos personales, no hay posibilidad de predecir los resultados relativos de cada persona en cada momento.

En ese proceso económico existen millones de iniciativas diarias personales cuyo resultado conjunto es imposible de predecir para cada individuo.

Justicia sí, pero no justicia social

Hayek no anula la idea de justicia. La justicia debe ser aplicada a nivel personal, en las acciones que tienen resultados intencionales y donde puede asignarse la responsabilidad sin duda alguna.

Pero la justicia no puede ser llevada al nivel de situaciones que no han sido creadas de manera intencional y deliberada.

La conducta de una persona en concreto puede o no ser justa. En el plano individual, pues, la justicia sí es aplicable. Pero cuando se habla de las consecuencias de actos individuales, la cuestión es otra.

Pueden existir conductas perfectamente justas que tengan consecuencias impredecibles en otras personas. Esos resultados y esas consecuencias no pueden ser vistos como justos, ni como injustos.

Sí, existen reglas de justicia en el nivel personal. Sabemos las reglas para actuar con justicia y sabemos cómo elevar el progreso. Pero en esas acciones puede haber consecuencias que produzcan riesgos y hasta fracasos que son inmerecidos en otros. Allí no tiene aplicación la justicia.

Dentro de un proceso espontáneo hay imprevistos. En ese mercado libre, cada persona decide su trabajo y los ingresos que espera corresponden al valor que otros asignan a su trabajo. Ese valor puede ser independiente de los méritos personales y de las necesidades individuales.

Las buenas intenciones personales no son de beneficio propio, pues lo que asegura el ingreso es el valor que los demás ponen en la persona. Las personas gozan de ingresos de acuerdo al valor que otros dan a los servicios que ellas ofrecen.

Por eso es que puede explicarse que un futbolista gane más dinero que un violinista. Pero el punto es el de las consecuencias imprevistas de actos correctos.

Casos concretos

  • ¿Quién es el culpable del despido de trabajadores de una fábrica cuyos productos ya no son preferidos por millones?
  • ¿Hay injusticia en la invención de un mejor freno para autos que hace cerrar la fábrica de una de las partes usadas en los frenos anteriores?
  • ¿Hay falta de justicia para el resto en la búsqueda del proveedor más accesible y de mayor calidad?
  • ¿Es injusto para otros al encontrar al mejor candidato para un cierto puesto?

La justicia social es, dadas sus dificultades, algo sin sentido, es como hablar de una piedra moral.

«Justicia social e igualdad: principios claves que deben guiar la acción en favor del derecho a la educación. «La preocupación sobre el incremento de las desigualdades en el mundo es ampliamente compartida hoy día, no solo entre las naciones, sino también dentro de los propios países”, indica el Sr. Kishore Singh, quien fue Relator Especial sobre el derecho a la educación de las Naciones Unidas. Con motivo del 70° aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos el Sr. Singh evocó junto a la UNESCO la situación del derecho a la educación. En todas las partes del mundo, las diferencias entre los ricos y los pobres generadas por una economía neoliberal descontrolada ha alcanzado proporciones aterradoras y su impacto en los sistemas educativos y en el derecho a la educación es muy grave, ya que acentúa las desigualdades y la iniquidad en el ámbito de la educación”, afirmó». es.unesco.org

La consecuencia inevitable de los reclamos de justicia social es el apoyo a la tradición política de gobiernos grandes que van más allá de la razón de ser del gobierno. Esto se asocia con el intervencionismo económico, el dirigismo y la planeación central de la economía.

El medio ambiente

Es una costumbre popular el agregar el calificativo ‘social’ a cualquier término —para darle una connotación positiva, de preocupación y compasión. El lenguaje mismo sufre una transformación con el simple añadido de ese término a cualquier otro.

Quizá el caso más notable de este agregado es el de «justicia social». Una combinación de términos que hace irresistible lo que sea que se haga si es que se califica como «de justicia social».

Tan popular es la expresión, que es ella usada sin clara idea sobre lo que significa. Por ejemplo, entenderla como el reducir pobreza y exclusión social, pero enmarcadas como políticas de gobierno:

«Políticas de estado que se proponen combatir la desigualdad y exclusión social. La justicia social consiste en un conjunto de políticas que tienen la misión de resolver situaciones en las que se plantea desigualdad y exclusión entre el colectivo social de un lugar determinado». definicionabc.com

Y esta otra definición bastante curiosa de justicia social como amor implantado por el gobierno con políticas distributivas opuestas al liberalismo.

«La justicia social tiene como esencia la distribución equitativa de todo aquello que se considera el bien común en una sociedad. Basada en la equidad, la igualdad de oportunidades y respeto de los derechos humanos, la justicia social refleja la organización política de la sociedad. Opuesta al liberalismo, la justicia social se basa en el amor a la persona en su individualidad, desde la perspectiva de los derechos sociales y deberes públicos (del Estado)». quesignificado.com. Énfasis mío.

📍 El tema de la columna se liga a concepciones con una relación directa, como equidad social, igualdad de oportunidad, derechos humanos y, por supuesto, políticas redistributivas.
Hace referencia a nociones de igualitarismo y sociedad igualitaria. Considera a la desigualdad social el más grave problema, el que debe solucionarse por medio del intervencionismo económico e incluso el intervencionismo moral.

El significado de justicia social

La realidad debe ser resaltada: las definiciones de justicia social se hacen a gusto de quien use el concepto.

Por ejemplo, en una página significa, entre otras cosas, derecho a vivienda digna y erradicación de la xenofobia. En otra, ella incluye becas para refugiados y créditos a microempresas. Un sitio reclama como justicia social el derecho al agua potable y protección a los vulnerables entre diversos otros.

El panorama variado de interpretaciones hace ver que ella es entendida como una colección diversa de demandas sociales que solo pueden cumplirse por medio de la intervención estatal actuando como agencia redistributiva:

«La justicia social, se enfoca generalmente, a la repartición justa y equitativa de los bienes y servicios básicos necesarios para el desarrollo y el desenvolvimiento de una persona en la sociedad como, por ejemplo, el bienestar socioafectivo, la educación, la salud y los Derechos Humanos». significados.com

Justicia social: una política de gobierno

A pesar de la variedad de definiciones, el concepto muestra que contiene fuertes elementos que exigen la intervención gubernamental para corregir problemas en la sociedad, con gran énfasis en la solución de «desigualdades».

Esta definición lo ilustra con especificidad asombrosa:

«La justicia social implica el compromiso del Estado para compensar las desigualdades que surgen en el mercado y en otros mecanismos propios de la sociedad. Las autoridades deben propiciar las condiciones para que toda la sociedad pueda desarrollarse en términos económicos. Esto quiere decir, en otras palabras, que no deberían existir unos pocos multimillonarios y una gran masa de pobres». definición.de. Énfasis mío.

Se ha afirmado que ella «Implica mecanismos efectivos reales y suficientes de redistribución de la riqueza para garantizar las condiciones materiales mínimas para que todas las personas puedan ejercer sus libertades básicas (expresadas en los Derechos Humanos)».

📌 Es esta una consecuencia notable. La promoción de la justicia social es igual a la promoción de políticas intervencionistas redistributivas. Nada más que una apariencia amable de actos gubernamentales de resultados dudosos.

Características de la justicia social

A pesar de la confusión creada por la variedad desordenada de explicaciones y definiciones, es posible hacer un recuento razonable de sus características centrales.

1. Es una política confusa de intervencionismo gubernamental

Ella hace referencia a una lista variable de acciones gubernamentales que solicitan su intervención en la vida de la sociedad, lo que no es malo en sí mismo. Todo depende qué tipo de intervención solicite. Si eso implica el establecimiento de un Estado de Derecho, no habría discusión alguna.

Pero si la intervención es económica, el asunto gira hasta convertirse en una defensa de la implantación de un sistema económico tipo socialista, lo que es un juego de otro tipo. Es una mutación que se vuelve una exigencia ideológica.

Más aún, ella puede tomarse como un llamado a acciones caritativas que son obligaciones morales personales más que actos de gobierno. Es decir, puede convertirse en una justificación del establecimiento de un Estado de Bienestar.

2. Es una exigencia que reclama igualdad por encima de libertad

La naturaleza de la justicia social es claramente igualitaria y coloca a las libertades personales en un plano muy secundario. Es decir, deja de ser propiamente justicia en su sentido ortodoxo y se transforma en una preferencia de ideología política bajo una apariencia bondadosa.

3. Concentra poder en el gobierno

Como toda política intervencionista, ella tiene un efecto no intencional poca veces notado. Acumula poder en el gobierno yendo en contra del principio de división de poder. Esto es lo que hace que conduzca a mayores riesgos de abusos de poder gubernamental.

Peor aún, tiende a crear oportunidades de clientelismo y corrupción.

4. Apariencia inocente que lleva a popularidad

La combinación de dos palabras, ‘justicia’ y ‘social’, ambas con connotaciones bondadosas que llevan a una aprobación inmediata e irreflexiva, producen un uso constante e imprudente que lo hace popular y políticamente correcto.

5. Visión colectiva no individual

Otra característica de la justicia social es su visión general macro, colectiva, que contempla sectores y grupos sin consideraciones individuales de identidad personal.


«¿Cómo se llama cuando alguien roba el dinero de otra persona en secreto? Hurto. ¿Cómo se llama cuando alguien toma el dinero de otra persona abiertamente por la fuerza? Robo. ¿Cómo se llama cuando un político toma el dinero de otra persona en impuestos y se lo da a alguien que tiene más probabilidades de votar por él? Justicia social»

— Thomas Sowell

Ahora, la justicia sola, sin calificativos

Considerada una de las virtudes principales, la justicia, sin calificativos, se sustenta en la idea de dar a cada quien lo que le corresponde, o merece. Como cuando se considera justo el castigo que merece un criminal, o la buena calificación dada a un alumno aplicado.

La noción de Dios perfectamente justo ilustra esta idea. Dará él a cada quien lo que merezca de acuerdo con sus fallas y méritos. Es la misma idea que, por ejemplo, persigue un tribunal al emitir un juicio sobre un crimen.

Justicia conmutativa

También existe un tipo de justicia, la conmutativa. Tiene como idea central la igualdad o la equidad en los tratos entre seres humanos. Téngase esto muy en cuenta para la definición de justicia social.

El caso más usado para explicarla es el de la compra y venta de bienes y servicios. Cuando, por ejemplo, alguien vende su coche a otro, y entre ambos acuerdan un precio de manera voluntaria, se tiene un caso de justicia conmutativa. 

Las dos personas juzgaron justo el precio, presuponiendo que entre ellos no hubo engaños.

Justicia retributiva

Aún otro tipo de justicia es la retributiva. Es la que busca una correspondencia o equidad entre la conducta personal y sus consecuencias. 

Es la que considera justo que quien mucho trabaja reciba más que quien no lo hace (pudiendo hacerlo). Otro de los elementos a considerar para entender la definición de justicia social.

La idea central es la misma del primer punto, la de dar a cada quien lo que le corresponde como consecuencia de sus actos. Como cuando se da una promoción en una empresa a la persona que más esfuerzo ha realizado y está mejor calificada.

Finalmente

El punto central de esta columna es la crítica de Friedrich Hayek a la noción de ‘justicia social’, argumentando que es un concepto peligroso, ilógico e inaplicable a la economía de mercado.

Para Hayek, la justicia social es una idea primitiva que, a pesar de su popularidad, tiene la consecuencia real e indeseada de otorgar un poder desmedido al gobierno, limitando la libertad individual y anulando la responsabilidad personal.

Hayek sostiene que la economía es un proceso espontáneo y no dirigido intencionalmente, por lo que no tiene sentido aplicar conceptos de justicia o injusticia a sus resultados.

Además, señala que el enfoque de la justicia social se ha trasladado del individuo a la colectividad, justificando la imposición de acciones gubernamentales sobre los ciudadanos y la redistribución de la riqueza, a menudo en búsqueda de una igualdad que va en detrimento de la libertad.

La ‘justicia social’ es una política confusa, igualitaria y centralizadora que, bajo una apariencia benevolente, promueve el intervencionismo estatal.


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